Torrecárdenas

El Hospital Universitario Torrecárdenas realiza las primeras intervenciones complejas de pelvis

  • La Unidad de Traumatología realiza un estudio previo e imprime en soporte 3D la fractura para conocer con detalle el alcance de la lesión antes de abordar la operación  

 El Hospital Universitario Torrecárdenas ha comenzado a realizar las primeras intervenciones complejas de pelvis en su Unidad de Traumatología lo que supondrá que cerca de veinte pacientes al año no deban desplazarse hasta hospitales de las provincias de Granada o Sevilla para someterse a este tipo de operación. Según ha explicado el director gerente del hospital almeriense, Manuel Vida, “de este modo vamos ampliando nuestra cartera de servicios, con una Unidad de Traumatología de alta complejidad lo que es un claro beneficio para la cuidadaníaº”.

Por su parte, el jefe de la Unidad de Traumatología, el doctor Antoine Nicolás Najem, ha detallado que “supone un paso más para el hospital el hecho de que ya podamos abordar este tipoo de intervenciones complejas para los pacientes de nuestro área de influencia. Con ello, nuestro objetivo es que lo más pronto posible podamos también ser el referente para el resto de la provincia de Almería”. La unidad la componen tres facultativos liderados por el doctor Álvaro Blanes, “que está al frente por su dilatada experiencia en el Hospital Virgen de la Macarena de Sevilla en este campo de la cirugía”.

Antoine Nicolás Najem ha explicado que “otra de las novedades” es que el Hospital Universitario Torrecárdenas dispone de una unidad de impresión en 3D “que nos permite imprimir las imágenes de la fractura que tiene el paciente y eso nos ayuda mucho a la hora de planificar la cirugía. Podríamos señalar que de este modo vemos previamente a lo que nos enfrentamos a la hora de planificar y realizar la intervención”.

El responsable de Traumatología del hospital almeriense ha señalado que el proceso que se realiza cuando un paciente tiene una fractura compleja de pelvis “comienza con su estabilización para, posteriormente, programar la cirugía entre los siete y catorce días ya que en muchas ocasiones, en este tipo de fracturas, es conveniente hacerla unos días después de producirse”. El proceso continúa con la realización de “todos los estudios necesarios con radiología y una prueba de TAC, que nos ayuda a hacer reconstrucción en imágenes 3D, donde contamos con el trabajo del técnico de Rayos, José Luis Ruiz. Eso lo pasamos a la impresora y nos permite ver y comprobar la forma de la fractura. Así podemos trabajar sabiendo a lo que nos enfrentamos”.

 

El doctor Najem ha recordado que “es muy importante este sistema de trabajo ya que hay patrones similares en las fracturas, según la clasificación que tenemos, pero no hay dos fracturas iguales, cada una tiene su complejidad ya que también influyen otros muchos factores del propio paciente, su situación, si tiene patologías previas o si las fracturas que se pueden asociar a ese traumatismo que ha generado la fractura de pelvis pueden modificar el proceso. Nosotros tomamos todas las precauciones y seguridad y, máximo en una época como en la que estamos, se estabiliza al paciente y se le somete a la intervención”.